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La Invisible de Malaga
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Proyecto 5a
Lugar: Universitat Vella; La Nau. Universitat de València.
La Invisible.
La Invisible es un espacio experimental de gestión colectiva que propicia el fomento de la auto-organización, el pensamiento crítico y la cultura libre y colaboratíva.
En La Invisible confluyen muy diversas trayectorias que conforman hoy nuestro proyecto cultural, social y político, sobre todo la que se refiere a la comunidad rebelde que se fue tejiendo entorno al Centro Social Okupado Casa de Iniciativas tras más de 10 años de recorrido: las luchas de los migrantes y de los precarios, las denuncias al modelo Málaga Costa del Golf, las zonas temporalmente autónomas okupadas por un día, el desafío de extender un modelo de culturacompartida, abierta, libre...
Los Centros Sociales Ocupados Autogestionados resultan así una de las creaciones política más interesante de las últimas décadas.
Son espacios de libertad, flexibilidad y adecuación al deseo latente de una vida urbana que no es vida porque no otorga a sus ciudadanos más activos, inquietos, pensantes, sensibles y, sobre todo, precarios, un medio / lugar donde verse, tocarse y sentir en común. Donde proyectarse.
Personas inquietas, con miradas críticas, que bajo la fuerza de la colectividad construyen un espacio-tiempo, aquí y ahora, cuestionando lo que se les ofrece porque no pueden participar, porque les viene dado, porque la producción y el mercado les arrebatan su potencial creativo.
Esta multitud de sentíres incómodos, que se mueven para conocerse entre sí, que se sienten solos y faltos de continencia, que no encuentran la libertad y autonomía necesaria para llevar adelante sus propuestas fuera del orden burocrático, centralista, disciplinario, tienen ya una larga trayectoria en la apropiación de un territorio que va mucho mas allá del aspecto físico o geográfico, conformando una construcción-apropiación de vínculos, un agenciamiento.
Propuesta
"Nosotras, nosotros siempre hemos estado en crisis: precarias, migrantas, invisibles... Queremos dinamitar el pensamiento único, hegemónico, impuesto tras largos siglos de abusos de poder por parte de unos cuantos.
Vivimos entre abundancia y solo nos llega escasez. Lo llevabamos gritando desde hace mucho: crisis, crisis, crisis de la democracia representativa, del capitalismo feroz, de las políticas del miedo, de la Europa fortaleza, del machismo, el racismo, el clasismo enraizado en las todas las instituciones de poder (ejército, iglesia, universidad...) que contaminan nuestras cabezas con su forma de entender y construir la vida. Nos cansamos de promesas, de esperar, así que pasamos a la acción. No es fácil, nos enseñaron a quedarnos callados, a no intervenir. Nos devoró el individualismo. Funcionar de forma colectiva requiere de imaginación, de paciencia, de crear lazos que propicien la confianza entre todas nosotras y nosotros.
La Invisible late, cambia, se transforma, se renueva a cada paso,con cada persona que cruza el umbral de la casa. Seguimos en movimiento; afrontando los conflictos propios de la convivencia; compartiendo nuestras riquezas, que van mucho más allá de lo material; festejando sentirnos juntas y buscando las vías para que la pluralidad de miradas se integren dentro y fuera de un espacio que va más allá de cuatro paredes, las de La Casa Invisible."
Proyecto 5b
Lugar: Instituto Francés.
Colectivo Engendro.
Engendro fue lo que no pudo ser y será lo que ya nace fallido, pues acepta la decadencia propia del caldo de cultivo en el que nace. De índole un poco perversa y vocación aviesa. Nacimos como propuesta colectiva, con pretensiones participativas: con la firme voluntad de crear y pensar en colectivo, colaborar de manera abierta con otras redes sociales.
Un colectivo de artistas vinculados a la ciudad de Valencia que trabajamos a través de la inserción de nuestros engendros en contextos específicos, donde se pretende construir un proceso de aprendizaje y retroalimentación con otros colectivos y agentes sociales, a través de una metodología procesual en el intercambio entre emisor y receptor como nexo común de los proyectos realizados.
Desde intervenciones de arte público propiciadas por contextos específicos donde hemos tratado la memoria, la cultura local, la vigilancia en la ciudad, hasta opciones de corte más ecologista e incluso a veces simbólico, el grupo pretende desarrollar una línea de trabajo donde lo de menos es la producción final si no la importancia de creación de situaciones y el manejo de representaciones colectivas.
El Engendro Colectivo, es en sí mismo un proceso abierto, tendiene a la disolución y sin metas preconcebidas.
¡Engendros del mundo, unirse!
“Fragmentando la pared”
Ante la pared en blanco se presenta la libertad de lo no escrito y el peso de escribir algo que sea escuchado. La pared ha servido durante la historia como soporte de lo político, y se ha ido transformando en una parte más de un espacio público cada vez más privado.
La queja, el insulto, la pintada, han buscado en la clandestinidad del muro el anonimato del grito con su registro. La propuesta se mueve entre la pared blanca como soporte de lo artístico y su reivindicación por fuera de esos límites. Los límites que el mundo del arte impone y los límites físicos del propio soporte.
De forma simbólica, el muro es descompuesto y repartido por el contexto en el que se instala, se recopila y se presenta para crear un discurso colectivo sin guión, evitando las barreras impuestas. El imaginario colectivo de crisis, junto con la carga simbólica del testigo “artístico” y el crudo testimonio de lo real, se aglutinan en un amalgama de gestos que nos remiten a las (im)posibilidades de reacción frente el contexto socio-político actual, a la reivindicación de la calle como espacio de conflicto político y la búsqueda de respuestas.
